El helado vegano de plátano y mantequilla de cacahuete es una opción deliciosa y saludable para aquellos que buscan un postre cremoso y lleno de sabor, pero sin los ingredientes de origen animal. Esta receta no solo es increíblemente fácil de hacer, sino que también es perfecta para aquellos días calurosos donde deseas algo refrescante y nutritivo.
Ingredientes para hacer helado vegano de plátano y mantequilla de cacahuete
- 4 plátanos maduros, pelados y congelados
- 3 cucharadas de mantequilla de cacahuete natural
- 2 cucharadas de jarabe de arce o agave
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- Una pizca de sal
- Opciones de toppings: nueces picadas, chips de chocolate vegano, frutas frescas
Paso a paso para hacer helado vegano de plátano y mantequilla de cacahuete
- Preparación de los plátanos: Pela y corta los plátanos en rodajas. Colócalos en una bandeja y congélalos durante al menos 4 horas, o hasta que estén completamente sólidos.
- Procesamiento: Coloca los plátanos congelados en un procesador de alimentos o una licuadora potente. Tritura hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Esto puede tomar unos minutos y es posible que necesites pausar y raspar los lados del recipiente varias veces.
- Añadiendo sabor: Una vez que los plátanos estén cremosos, agrega la mantequilla de cacahuete, el jarabe de arce, el extracto de vainilla y una pizca de sal. Procesa todo hasta que se mezcle bien.
- Congelación final: Transfiere la mezcla a un recipiente apto para congelador. Si deseas un helado más suave, sírvelo inmediatamente. Para una consistencia más firme, congélalo durante 1-2 horas.
- Servir: Sirve tu helado vegano de plátano y mantequilla de cacahuete con tus toppings favoritos.
Por qué elegir esta receta
Este helado vegano de plátano y mantequilla es mucho más que un simple postre. Es una fuente excelente de nutrientes, gracias a los plátanos ricos en potasio y la mantequilla de cacahuete llena de proteínas y grasas saludables. Además, al ser una receta vegana, es ideal para aquellos que siguen una dieta libre de productos de origen animal o para quienes son intolerantes a la lactosa. Su preparación es sencilla y no requiere de una máquina de helados, lo que lo hace accesible para todos. Finalmente, su sabor naturalmente dulce y su textura cremosa lo convierten en una opción perfecta para satisfacer antojos de una manera saludable y deliciosa.
